HAY UNA SOLUCIÓN

HAY UNA SOLUCIÓN
Oración de la Serenidad: Dios concédeme SERENIDAD para aceptar las cosas que no puedo cambiar… VALOR para cambiar las que puedo… y SABIDURIA para reconocer la diferencia…

19.11.13

La Tolerancia




Dr.Bob: cultivando la tolerancia


Durante nueve años en AA, he observado que aquellos que siguen el programa de Alcohólicos Anónimos con la mayor sinceridad y celo no solamente mantienen la sobriedad, sino que a menudo adquieren un mejor carácter, y mejores actitudes también. Una de estas es la tolerancia. La tolerancia se expresa a si misma en una variedad de formas: en la amabilidad y consideración hacia el hombre o la mujer que está empezando la marcha junto al camino espiritual: en la comprensión de aquellos que quizás han sido menos afortunados en las ventajas de la educación; y lo comprensión hacia aquellos cuyas ideas religiosas pueden parecer a gran distancia de las suyas propias.

La tolerancia da, como un subproducto, una mayor  grande libertad para decidir si  aferrarse a   ideas preconcebidas y adherirse a opiniones de una forma obstinada. En otras palabras, a menudo promueve una mente abierta, lo cual es de una gran importancia- es , de hecho, un prerequisito para la terminación exitosa de cualquier linea de búsqueda, tanto si es científica como si es espiritual.

AA Grapevine, Inc July 1944 


La Tolerancia: Es una cualidad personal que se define como el respeto a las ideas, creencias o prácticas de los demás aunque sean diferentes o contrarias a las propias. Es ser indulgente, respetuoso y considerado a los demás. 

Uno de los valores más importantes en la consecución de una cultura de paz es precisamente la tolerancia, que implica la aceptación de los otros criterios, las otras personas, localidades, regiones o países, y no puede haber paz si no existe una atmósfera de tolerancia en las relaciones sociales.

La tolerancia es la capacidad de conceder la misma importancia a la forma de ser, de pensar y de vivir de los demás que a nuestra propia manera de ser, de pensar y de vivir.
Si comprendemos que nuestras creencias y costumbres no son ni mejores ni peores que las de otras personas, sino simplemente distintas, estaremos respetando a los demás.

No es preciso compartir una opinión para ser capaz de considerarla tan válida como cualquier otra. Lo que hace falta es tratar de ponerse en el lugar de los demás.

(Asociación Mundial de Educadores Infantiles)

El punto límite de la tolerancia; ese momento donde no aguantamos más esa diferencia y concretamos una acción directa, nos deja a grandes rasgos, dos caminos a seguir: 

  • El rechazo y sus variables (represión, evasión, sumisión, ira, violencia, negación, etc.)
  • La aceptación, trayendo a nuestra vida discernimiento, comprensión, liberación, verdad, Amor, etc.
En este último punto queda claro que dicha aceptación, no nos obliga a pensar, sentir o creer en aquello que el otro sostiene. Simplemente reconocemos a esa manera de ver la vida, como una verdad más, en el mundo diverso que todos compartimos.
(Ricardo Benedetti)

La Verdadera Tolerancia

Poco a poco empezamos a poder aceptar no sólo las virtudes de nuestro prójimo sino también sus defectos.

Acuñamos la poderosa y significativa expresión "Amemos lo mejor que tienen los demás – y nunca temamos lo peor".

* * * * *
Finalmente, llegamos a ver que todo el mundo, incluidos nosotros, está hasta cierto grado enfermo emocionalmente, y que también estamos a menudo equivocados.

Al sucedernos esto, nos acercamos a la verdadera tolerancia y vemos lo que el verdadero amor para con nuestros prójimos realmente significa.

GRAPEVINE, Enero de 1962
DOCE Y DOCE, pág. 99